Les presentamos el nuevo material que utilizarán docentes y alumnos de 1ª a 7º grado
1º GRADO TOMO 02
2º GRADO TOMO 02
3º GRADO TOMO 02
4º GRADO TOMO 02
5º GRADO TOMO 02
6º GRADO
7º GRADO
Les presentamos el nuevo material que utilizarán docentes y alumnos de 1ª a 7º grado
1º GRADO TOMO 02
2º GRADO TOMO 02
3º GRADO TOMO 02
4º GRADO TOMO 02
5º GRADO TOMO 02
6º GRADO
7º GRADO
A través del Proyecto de Quinto grado F: "Objetos Maravillosos" en esta oportunidad acercamos como objeto el balón de fútbol dado que este objeto reúne multitudes.
El fútbol sea un deporte de hombre es una cosa que no se puede afirmar. Hay "señoritas" que lo juegan muy bien; en las tribunas, podemos encontrar chicas y señoras que saben un montón; en los clubes, hay mujeres que dan el alma por su camiseta. Pero Todavía existen varones que se molestan cuando ellas les discuten jugadas.
Ellas, muchas veces, tienen razón.
El autor:
Esteban Rey nació en 1970. Da clases de literatura e inglés. Vive en la Ciudad Autónoma de Buenos Aires.
Colabora en diferentes publicaciones relacionadas con el arte y coordina talleres literarios. Está armando un libro con cuentos referidos a distintos deportes.
Articulamos con la Ley de Convivencia; ESI e Inclusión para la formación ética y ciudadana.
El libro del cuál extraemos el cuento es:
Cada 17 de agosto conmemoramos un nuevo aniversario del fallecimiento del General José de San Martín, uno de los máximos próceres de nuestra Nación y nuestra querida América.
Puso su vida al servicio de la
libertad de los pueblos y sus logros fueron decisivos para las independencias
de Argentina, Chile y el Perú.
En este espacio dejamos reflejado
las composiciones para el General José de San Martín; como el trabajo colectivo
de los alumnos y alumnas de 7 grado del turno mañana y tarde de nuestra querida
Escuela Primera Junta.
El Cruce de los Andes consistió
en el punto de partida de la consolidación de la independencia en lo que hoy
conocemos como Argentina, Chile y Perú.
A inicios de 1814, cuando el Cruce de los Andes fue concebido, Chile se encontraba en poder de los patriotas, pero fue tomado nuevamente por los realistas en octubre de ese mismo año. De modo que cuando se inició el camino hacia Santiago, a principios de febrero de 1817, San Martín sabía que del otro lado de la cordillera lo esperaban tropas españolas que pretendían impedir el avance del Ejército de los Andes. Por esta razón, utilizó distintas tácticas de distracción, entre ellas, la de dividir sus tropas en seis frentes: dos ingresaron a Santiago de Chile por el norte, otros dos por el centro (que fue por donde efectivamente ingresó San Martín) y finalmente dos por el sur (el lugar por donde los realistas creían que llegaría el Ejército de los Andes).
Este avance por sorpresa permitió el triunfo en la cuenca de Chacabuco (12 de febrero), al que siguieron una inesperada derrota en Cancha Rayada (marzo de 1818) y el aseguramiento del triunfo patriota semanas después en la batalla de Maipú (abril de 1818). La independencia de Chile, declarada en 1818, estaba asegurada.
EL CRUCE DE LOS ANDES EN 360º
San Martín llegó a Buenos Aires el 9 de marzo de 1812, junto con Carlos de Alvear, quien se convirtió en jefe de la Logia Lautaro, un grupo masónico vinculado a otros similares en Europa, que se organizó en América para impulsar la independencia en toda Hispanoamérica. En Buenos Aires, San Martín coincidió con Bernardo de Monteagudo, un referente de la «Sociedad Patriótica» que lo acompañará a lo largo de toda su trayectoria política y militar.
Recordemos que Monteagudo formaba
parte del sector más radicalizado de la Revolución de Mayo y se identificaba
con los «morenistas» (el sector referenciado con las ideas políticas de Mariano
Moreno, uno de los secretarios de la Primera Junta, fallecido en 1811).
La Primera Junta le confió a San Martín, recién llegado a Buenos Aires, la organización de un regimiento con el objetivo de cuidar las costas del río Paraná, lo que dio origen al Regimiento de Granaderos a Caballo. Este regimiento tuvo un entrenamiento militar de excelencia, basado en las tácticas y las estrategias de la resistencia española a los ejércitos napoleónicos, y debutó en febrero de 1813 en la batalla de San Lorenzo, donde derrotó a las tropas realistas.
En enero de 1814 San Martín fue
nombrado jefe del Ejército del Norte, relevando a Manuel Belgrano. Rápidamente
llegó a una conclusión que cambió el rumbo de los acontecimientos en las
Provincias Unidas y la historia de la estrategia militar: la idea de sorprender
al ejército realista lanzando una ofensiva, ya no desde el Alto Perú —donde los
españoles tenían posiciones consolidadas—, sino desde Chile, para luego llegar
por mar a Lima, que era el centro del poder español. San Martín anticipó este
plan a Rodríguez Peña en una carta.
Por esta razón, San Martín
declinó el mando del Ejército del Norte y solicitó ser declarado intendente de
Cuyo, lo cual le fue concedido por Gervasio Posadas en 1814. Con el apoyo de la
sociedad cuyana, resistió un intento de desplazamiento propiciado por el
director supremo, su camarada Carlos de Alvear, quien poco después fue
reemplazado por Juan Martín de Pueyrredón, que se reunió con San Martín en
Córdoba y aprobó su plan. Desde 1815 a febrero de 1817, San Martín organizó en
Mendoza el Ejército de los Andes, mientras presionaba al Congreso de Tucumán
para que declarara la independencia.
San Martín nació el 25 de febrero
de 1778 en Yapeyú, hoy provincia de Corrientes, y murió a los 72 años en
Boulogne Sur Mer, Francia. Aunque suene paradójico, siendo uno de los próceres
más destacados del país, vivió pocos años en estas tierras. A los cinco años
partió con su familia hacia Cádiz, España, donde se enroló en el ejército para
combatir a las tropas napoleónicas que, luego de invadir el reino español, obligaron
a Fernando VII a dimitir en su trono en 1808. En este período, ascendió de
capitán de caballería a teniente coronel, por su papel en la Batalla de Bailén
(1808).
La Rendición de Bailén es un óleo
realizado en 1864 por el pintor español José Casado del Alisal.
Sus dimensiones son de 338 × 500
cm.
En 1921 fue donada por el rey
Alfonso XIII al Museo de Arte Moderno.
El avance de Napoleón sobre Europa era sin dudas el acontecimiento político-militar más importante de aquellos días. A pesar de ser uno de los protagonistas de esa experiencia en las filas de la resistencia española, hacia 1811 San Martín decidió volver a América, no sin antes tener una breve estadía en Londres.
Un 9 de marzo de 1812, San Martín
arriba a Buenos Aires a fin de colaborar con el sueño de liberación americano.
En el mapa interactivo podrás ver los viajes de José de San Martín de Yapeyú a España y de Europa a la Revolución.